¿Y aún crees en el amor a primera vista?


Reparto de primera para una película ídem
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La chava de tu vida llega caminando a ti. Despacio. Tu mirada coincide con la de ella. El momento es sublime, es perfecto. Un accidente y la vida te cambia. Les cambia. Un par de extraños caminando en Londres forman ahora una pareja.
"And so it is... life goes easy on me, most of the time", canta Damian Rice, como fondo de esta secuencia y como tema de Closer, cinta que por fin llega a pantallas nacionales, un día antes de la 62 entrega de los Globos de Oro, para la cual tiene cinco nominaciones incluyendo mejor película dramática. Y no es gratuito.
Alice (Natalie Portman, camaleónica), una stripper neoyorkina es arrollada por un taxi, ante la mirada de Dan (Jude "Alfie" Law), una suerte de "periodista" encargado de redactar obituarios. El flechazo es inminente. La relación entre desconocidos da inicio.
Pero el director Mike Nichols (el mismo de la sesentera The Graduate, con Dustin Hoffmann y Primary Colors, sobre escándalos sexuales en presidenciables de la Casa Blanca) juega con el espectador y en su segunda secuencia rompe con la línea del tiempo, evitando narrar a detalle los pormenores e irse sobre el gran dilema de la cinta: los flechazos a primera vista.
Bajo el lente de Anna (Julia Roberts) en su estudio privado, Dan quedará nuevamente prendado de una desconocida. Con un libro por publicar bajo el brazo, donde emplea la vida de Alice como eje central, Dan será el cupido involuntario que unirá la vida de la fotógrafa con Larry (Clive Owen, perverso, deleznable como él solo), un dermatólogo adicto a los chats de sexo, quien inocentemente cae tras una chaqueta bien escrita del primero. Grave error para ambos.


La secuencia donde Anna y Larry se conocen, enmedio de un acuario, es tan cómica como esplendorosa
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El cuadrilátero entre las dos parejas se acaba de armar. Gustosa de fotografiar a propios y extraños, una exposición de Anna será el punto de encuentro para los cuatro: es la partida para "definir" sus verdaderos intereses sentimentales y darle vuelta a la aparente historia. Alice es aún una niña pero no tiene nada de precoz, mientras que Anna ya es toda una mujer (divorciada). Larry es un completo hedonista, macho, cavernícola que sólo busca el placer carnal. Y por su parte Dan... el encargado de dejarse llevar por sus instintos con las respectivas consecuencias.


Por su rol como Alice, Natalie Portman podría alzarse por primera vez con el Globo de Oro. Hermosa y camaleónica.
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Closer es todo un pin pon de parejas, donde el que la hace la paga, los arrepentimientos se vuelven el día a día, donde el sexo -y qué bien les salió- deja de ser mero placer para ocupar una estúpida importancia. Es, sin duda, una historia muy cercana a la crisis de parejas que hoy en día arremete y una crítica al amor a primera vista; un juego inteligente planteado por el director Nike Nichols, mejor interpretado por todo su elenco, en el que Clive Owen también aspira a la estatuilla dorada que otorga la prensa foránea en Hollywood. Totalmente disfrutable, ingeniosa, divertida, desavenida.
Es una lástima que cintas de valía lleguen a nuestra cartelera un día antes de su posible noche de gloria. Es más lástima no tener el resto de la terna que los expertos han denominado, pues en la categoría de mejor película, ninguna de las cinco restantes se han exhibido: The aviator, Hotel Rwanda, Kinsey, Million dollar baby y Finding Neverland.